Pensad globalmente y actuar localmente es la premisa fundamental para revertir el cambio climático y promover el desarrollo sostenible. En Valencia, este binomio ya es una realidad, a través del Observatorio del Cambio Climático. Una entidad que investiga, sensibiliza y pone en marcha programas que contribuyen a luchar contra el calentamiento global.

Una de las iniciativas que ha llevado a cabo el Observatorio recientemente se titula “Valencia cambia por el clima”. Actividades diversas en distintos espacios de la ciudad encaminadas a concienciar a la ciudadanía en hábitos de vida y consumo más sostenibles. Estas soluciones dependen de todos y cada uno de nosotros. Es por eso que una de las acciones dentro de este programa, “Diálogo en perspectiva sobre el cambio climático” reunió en un coloquio a cinco profesionales de distintas disciplinas para reflexionar de manera conjunta sobre cómo abordar este fenómeno. Desde el arte, la salud, la ciencia, la comunicación o la educación no formal, cinco formas de mirar a un mismo reto buscando respuestas que aúnen voces distintas.

Una de las expertas invitadas fue María José Sanz, directora del Basque Centre for Climate Change  que de manera cercana y con un análisis certero, nos habló del papel de la comunidad científica.

Tuve el privilegio de unir mi voz a este coloquio junto a las de Mª José Sanz, Cristina Monge, Eva Pastor, Anna Mateu y la magnífica moderadora Pilar Almenar. Como representante del sector cultural, quise poner hincapié en cómo el arte y la cultura son esenciales e idóneos para concienciar acerca de la necesidad de integrar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en nuestra vida.

Como apunta el oceanógrafo Carlos García Soto, el cambio climático es el problema que define y definirá nuestro tiempo. La premura es urgencia y precisa de una visión holística, innovación, creatividad y alianzas para poder alcanzar el desarrollo sostenible en 2030.

Suscríbete a nuestro boletín